En los últimos meses, los bancos encendieron las alarmas: la morosidad en el pago de tarjetas de crédito alcanzó el nivel más alto de los últimos 15 años. En esta entrevista analicé qué hay detrás de este fenómeno y qué alternativas pueden considerar las familias frente a un escenario de endeudamiento creciente.
La tarjeta de crédito como salvavidas diario
Cada vez más familias recurren a la tarjeta para gastos esenciales: comida, combustible o medicamentos. Ese círculo de deuda se vuelve difícil de cortar porque, además de que mes a mes se acumulan intereses y el pago total del resumen se hace inalcanzable, son artículos de mucha necesidad que sí o sí vas a seguir comprando y, probablemente, volviendo a financiar.
Préstamos y adelantos: solución o problema
Muchas veces los préstamos aparecen como salida, sobre todo cuando son del mismo banco. Sin embargo, la clave es saber que después de usarlos hay que poder sostener el pago mensual y no volver a usar la tarjeta para lo mismo. En otros casos, el descubierto bancario o los adelantos de sueldo terminan atrapando a las familias en un ciclo que se repite mes tras mes.
La clave está en los ingresos
Más allá de los recortes de gastos, el verdadero desafío es generar ingresos adicionales. Sin un cambio en ese punto del presupuesto, cualquier solución termina siendo temporal. Los préstamos y adelantos no hacen más que extender la rueda del endeudamiento.
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